A Rogueira, el auténtico bosque atlántico gallego.
La diversidad botánica de la Sierra de O Courel se manifiesta en comunidades vegetales como las que forman sus bosques. Así, a los sotos de castaños, los acevales, las reboleiras, los bosques de ribera, los robledales de montaña, los encinares, abedulares y hayedos se suman las devesas, que sintetizan a la esencia de la vegetación de las montañas orientales de la provincia de Lugo.
Situadas en laderas montañosas sombrías y de fuerte pendiente, entre los 800 y 1400 metros de altitud, las devesas constituyen uno de los grandes tesoros naturales de O Courel, contando con extraordinarios ejemplos como la Devesa da Escrita, Faro, Romeor y especialmente, A Rogueira, considerada pola entidade World Wildlife Fund uno de los bosques más importantes de la Península Ibérica.
La riqueza de especies de flora que caracteriza A Rogueira queda patente con la presencia de conjuntos de abedules, fresnos, avellanos, robles, arces, serbales, acebos, tejos y hayas. En la parte baja de la devesa destaca la presencia de encinas debido al sustrato calizo del terreno, que también ha dado lugar a la fomación de cuevas. En lo que atañe a su sotobosque, sobresale la presencia, entre otras especies, de asperula olorosa, roble helecho común, violeta bulbosa o la uva de zorra.
La Devesa da Rogueira, situada en el ala norte del monte Formigueiros, el de mayor altitud de O Courel, está considerada como el auténtico bosque atlántico gallego por aglutinar aproximadamente el 20% de las especies representadas en la flora presente en la Galicia interior.
Un sendero invita a recorrer el corazón de este bosque desde el alto do Couto o desde el aula de la naturaleza de Moreda, donde se puede visitar una exposición didáctica sobre los valores de este espacio natural. En las inmediaciones de esta camino se encuentran las fuentes de O Cervo, de aguas calcáreas y ferruginosas, el mirador de Pico Polín y la laguna de A Lucenza, que con más de 16000 años de antigüedad se suma a las profundas huellas que la glaciación dejó en estas montañas.
