Ribadeo
Ribadeo surge como núcleo originario en lo que es hoy el puerto de Porcillán, situado en la parte baja de la villa y junto a la ría que forma el Eo en su desembocadura. Durante la Edad Media, con Viveiro y Mondoñedo, Ribadeo llegó a alcanzar una importante actividad gracias a los privilegios reales otorgados por reyes como Fernando II y posteriormente por su condición de condado.
Ribadeo contó además con una frenética actividad comercial que hizo de su puerto uno de los de mayor trasiego del litoral cantábrico gracias a la exportación de madera, tejidos y hierro fosfórico extraído de las minas de A Pontenova. Este intercambio de mercancías logró generar una riqueza que quedó plasmada en la arquitectura de su casco histórico que, situado en la parte alta de la villa, aúna en perfecta sintonía la tradición marinera y la huella de los industriales, armadores, banqueros e indianos que hicieron vivir momentos de pujanza a esta localidad.
El recorrido por el Ribadeo antiguo se puede iniciar en el puerto deportivo, donde un ascensor panorámico conecta con el mirador de la Atalaya, donde se conserva la capilla de la Santísima Trinidad, edificio más antiguo del lugar. Desde aquí, un relajado paseo nos llevará a la plaza de España, donde se pueden contemplar algunos de los edificios y monumentos más singulares de la arquitectura ribadense: el convento de Santa Clara, habitado por religiosas que elaboran una exquisita repostería; la iglesia de Santa María del Campo; el palacio del marqués de Sargadelos, que hoy acoge la casa consistorial, y la torre de los Moreno, emblema de Ribadeo y referente de la arquitectura indiana de la provincia de Lugo. Desde aquí, se puede iniciar la conocida como “ruta de los indianos”, un recorrido que nos llevará hacia la Calle Rodríguez Murias y el Barrio de San Roque para culminar en el antiguo cuartel de Ribadeo, siguiendo un trazado que nos mostrará el éxito alcanzado por los emigrantes que a finales del siglo XIX y comienzos del XX retornaron a su tierra natal e invirtieron su fortuna en labores filantrópicas y lujosas mansiones en las que plasmaron las innovaciones arquitectónicas de la época.
El casco antiguo de Ribadeo es también lugar de paso hacia Compostela. El Camino de Santiago del Norte, declarado Patrimonio de la Humanidad en el 2015, inicia aquí su itinerario gallego tras cruzar el puente de los Santos, punto de conexión con la vecina comunidad asturiana.
Ribadeo es actualmente un lugar con gran actividad durante todo el año. Su cercanía con Asturias, su atractivo comercio, su reputada gastronomía y el hecho de que en sus proximidades se encuentre la playa de As Catedrais, considerada una de las mejores del mundo, lo convierten en punto de encuentro de viajeros nacionales e internacionales.
Para recorrer el casco histórico se recomienda solicitar las audioguías ficcionadas que están a disposición en la oficina de turismo municipal o descargándolas en este enlace.
Y además…
*Durante el año, son numerosas las celebraciones que completan la oferta turística de Ribadeo: las fiestas de la Virgen del Carmen, la fiesta del Percebe de Rinlo, la gira de Santa Cruz, la fiesta de San Roque, la muestra folclórica internacional o la fiesta indiana ponen la guinda a sus numerosos atractivos.
*Muy cerca del casco histórico, el litoral de Ribadeo ofrece estampas idílicas como el entorno del faro de Isla Pancha,el antiguo cargadero de mineral, el Castillo de San Damián o playas como Os Xuncos, Esteiro, Os Castros-Illas o As Catedrais- Augasantas, que son verdaderos epicentros del turismo gallego.