Una de romanos
La romanización es una etapa que se extiende desde finales del siglo I a.C. (terminadas las Guerras Cántabras) hasta inicios del siglo V d.C. En este período, la provincia romana de Gallaecia ocupaba el noroeste peninsular. De esta época se conservan en la provincia de Lugo un conjunto de bienes que son muestra de un auténtico fenómeno cultural y que ponen de manifiesto la importancia de que aquí se ubicase la capital de uno de sus Conventus Iuridicus: la ciudad romana de Lucus Augusti, lugar estratégico en la organización administrativa y territorial del Imperio.
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La Muralla de Lugo: Patrimonio de la Humanidad
Construida entre los siglos III y IV de nuestra era, en un momento convulso para el imperio romano, la muralla romana de Lugo constituye un auténtico modelo desde el punto de vista constructivo, ya que tanto su ubicación, situada originalmente entre un foso y un pasillo interior o intervallum, su estructura a base de una sucesión de cubos y cortinas y los materiales empleados en su construcción, hicieron de Lugo una ciudad preparada para resistir cualquier ataque.
Actualmente, la muralla cuenta con diez puertas que permiten entrar y salir del casco histórico de la ciudad. De estas puertas, cinco se consideran originales de época romana. Además, el adarve que recorre su parte superior permite recorrer a pie los más de 2 kilómetros de un perímetro que se conserva en su totalidad, un rasgo que hace que este monumento sea único en el mundo
La muralla de Lugo fue declarada Patrimonio de la Humanidad en el año 2000, un reconocimiento al papel jugado en la trayectoria histórica de la ciudad y al significado social que adquiere en la vida de todos los lucenses.
Información:
Centro de Interpretación de la Muralla de Lugo
Teléfono: 982 25 16 58
Casa de los Mosaicos
Situada en la Calle Doctor Castro, esta domus, que perteneció a algún personaje importante de la ciudad romana, muestra parte de sus dependencias musealizadas. En el conjunto, destacan los restos de un patio porticado, una sala de recepción cuyo suelo estaba decorado con mosaico y un comedor o triclinium de invierno.
Información:
Teléfono: 982 25 16 58
La Domus del Mitreo
En la Plaza de Santa María, el edificio del Vicerrectorado acoge los restos de la Domus del Mitreo, un yacimiento cuya excavación permitió reconstruir la historia de la ciudad y su evolución urbanística. En las diferentes dependencias, que han sido musealizadas, destacan los restos de un templo y un ara votiva dedicada al Dios Mitra, un hallazgo que singulariza este lugar en todo el noroeste de la Península.
Información:
Teléfono: 982 82 15 13
Las termas y el puente romano
En el entorno del río Miño, la ciudad de Lugo conserva dos de las muestras más representativas de su legado romano: las termas o baños públicos y el puente.
Las termas romanas están situadas en las dependencias del actual balneario. Datadas del siglo II d. C., conservan dos salas originales: el apodyterium o vestuario y una antigua sala de baños que fue reaprovechada posteriormente como capilla del balneario.
El puente romano, levantado sobre el río Miño, fue originalmente construido en el siglo I, siendo sometido a diferentes reformas en los siglos XII, XIV y XVIII. Zona de paso de la Vía Romana XIX y del Camino Primitivo de Santiago, actualmente es de uso peatonal y en su entorno se encuentra una animada zona de ocio y deporte muy transitada por los lucenses.
Información sobre las termas romanas:
Balneario de Lugo: Teléfono: 982 22 12 28
Otros restos arqueológicos de la ciudad de Lugo
En Lugo, los trabajos arqueológicos de los últimos años han sacado a la luz numerosos hallazgos en diferentes puntos de la ciudad: es el caso de la piscina ritual de la Plaza de Santa María, el acueducto de la Plaza de San Marcos, los cimientos de la puerta romana en la puerta Nova de la muralla, el templo romano del Círculo de las Artes, la estructura funeraria en la vieja cárcel, diferentes restos en el Barrio de A Tinería, hornos cerámicos en a Rúa Nova o la calzada romana en el Pazo da Maza. Algunos restos procedentes de hallazgos o excavaciones arqueológicas pueden visitarse en la correspondiente sección del Museo Provincial de Lugo.
Santa Eulalia de Bóveda: el gran enigma de la arqueología gallega
A 14 kilómetros de la ciudad de Lugo, la parroquia de Santalla de Bóveda de Mera guarda uno de los grandes misterios todavía pendientes de resolver por la Historia: el conjunto tardorromano de Santa Eulalia, situado bajo la actual iglesia parroquial, acoge los restos del que parece ser un edificio de tres naves con cubierta abovedada y una pequeña piscina en su parte central. Las pinturas murales del interior, con motivos en los que predominan figuras de aves, así como los relieves de figuras danzantes del exterior, alimentan las dudas sobre las funciones de este lugar, que llegó a identificarse como un lugar de culto a las Ninfas o un templo en honor a Dionisio.
Información:
Teléfono: 982 16 01 24
La Vía Romana XIX y otras calzadas romanas secundarias
Tras la conquista del Noroeste de Hispania, Roma lleva a cabo la reorganización administrativa del Imperio mediante la creación de los Conventus Iuridicus de Braga, Lugo y Astorga. A partir de ese momento, se hizo necesario el diseño de una red viaria que sería estratégica en las comunicaciones entre las tres ciudades.
Por la actual provincia de Lugo transcurría la Vía XIX del itinerario Antonino, que unía las capitales de los tres Conventus Iuriducus del noroeste peninsular. Actualmente, la toponimia y los restos arqueológicos hallados permiten en parte recomponer su trazado por los municipios de Palas de Rei, Lugo, O Corgo, Castroverde, Baralla, Becerreá y Cervantes.
Por otros lugares de la provincia, como la Ribeira Sacra, transcurren otros trazados secundarios que se han reaprovechado para usos turísticos. Es el caso de la calzada romana denominada “codos de Belesar”, en el municipio de O Saviñao, que une la parroquia de Diomondi con el pueblo de Belesar y que actualmente se integra en el trazado del Camino de Invierno a Santiago.
Minería aurífera: el túnel de Montefurado
Situado en el municipio de Quiroga, en el curso del río Sil, el túnel romano de Montefurado es una de las grandes obras de ingeniería minera romana en el noroeste peninsular. Datado del siglo II, época del emperador Trajano, el túnel, horadado en la denominada “Pena do Corvo” contaba inicialmente con una longitud de 120 metros. Una riada ocurrida en 1934 provocó el derrumbe de parte del túnel, dejándolo en los 52 metros de largo con los que cuenta en la actualidad.
Construido para desviar el lecho del Sil, secando su meandro original para extraer el oro depositado en su cauce, Montefurado forma parte de los recursos de una original ruta que puede hacerse en coche por la Ribeira Sacra y tierras del Courel y que incluye las minas de Margaride, en Quiroga; Os Medos, en A Pobra do Brollón, el mirador de Mostad, con vistas a la mina de A Toca, en O Courel y los castros mineros de Vilar y A Torre.
